Recorrido por los belenes más curiosos de la Comunidad Valenciana | Federación de Campings Comunidad Valenciana

Recorrido por los belenes más curiosos de la Comunidad Valenciana

Los belenes son una tradición que se mantiene en muchos lugares del mundo, y la Comunidad Valenciana es uno de ellos.

De hecho, visitar belenes es una de las actividades más esperadas del calendario porque nos permite sumergirnos, como pocas, en el arte, la historia y la magia de la Navidad.

Historia de los belenes

Las primeras representaciones del nacimiento de Jesús se encuentran en las catacumbas de época romana, pero no será hasta el siglo VIII cuando comiencen a ser representadas como escenas costumbristas en las plazas de pueblos y villas.

Aun así, para encontrar el primer Belén católico, tenemos que remontarnos al siglo XIII, concretamente, al año 1223, cuando Francisco de Asís pidió una dispensa al papa Honorio III para crear un pesebre «viviente» en una cueva de Greccio, pequeña localidad de la región italiana del Lacio.

Aquella representación tuvo notable éxito, y estos breves teatros con personas reales se convirtieron en una herramienta muy útil para evangelizar a la población rural, mayoritariamente analfabeta.

En poco tiempo, muchas ciudades italianas empezaron a montar pequeños belenes figurativos en sus iglesias, aunque su primera forma moderna se debe a san Cayetano de Thiene, que en 1534 ideó un pesebre con figuras de madera cubiertas con ropajes de la época.

Es en el Barroco cuando esta tradición conquista a las casas señoriales y a la Realeza, siendo el momento del máximo esplendor de los belenes napolitanos, en los que lo religioso y lo profano se mezcla, y en los que es habitual incorporar en las escenas personajes populares y conocidos de la ciudad.

Serán los reyes de España Carlos III y su esposa, María Amalia de Sajonia, quienes importaron esta tradición hasta nuestro país (precisamente, porque Carlos III había sido rey de Nápoles) construyendo en Palacio una sala especial para el «Belén del Príncipe», uno de los más bonitos del mundo.

En el siglo XIX, las figuras para belenes empezaron a fabricarse en serie y a venderse en los mercadillos navideños de toda la geografía española, lo que facilitó que cada vez más gente pudiera tener su propio Belén en casa.

Hoy en día, los belenes combinan creatividad, elementos innovadores y fidelidad a la tradición, y son un reclamo turístico en muchos pueblos y ciudades durante las fiestas navideñas.

Guía de Belenes de la Comunidad Valenciana 2024-2025: los más importantes y los que no puedes perderte 

Hemos seleccionado algunos de los belenes más curiosos de la Comunidad Valenciana para visitar durante las próximas fiestas.

¿Los conoces? ¿Crees que falta alguno en esta lista?

Si las próximas semanas estás en la región o te alojas en uno de nuestros campings asociados, no puedes perdértelos.

  1. Belén artístico del Salón de Cristal del Ayuntamiento de Valencia. Confeccionado por la Asociación de Belenistas, mide 40 metros cuadrados y cuenta con más de 350 figuras, 200 animales y 450 complementos artesanales.
  1. Belén gigante de Elche. Se coloca en pleno corazón de esta ciudad alicantina, en la emblemática Plaza de Baix. Representa a la Sagrada Familia, aunque sus figuras más llamativas son los ángeles trompeteros, que realzan el carácter simbólico de la Navidad en Elche.
  1. Belén del Museo Nacional de Cerámica. Situado en el Palacio del Marqués de Dos Aguas, en el centro de la capital valenciana, este belén de estilo napolitano es muy completo, y esta Navidad puede visitarse de manera gratuita.
  1. Belén a tamaño real de Xátiva. Xátiva tiene el Belén monumental más grande de España . Tiene un recorrido visitable de más de 100 metros lineales que incluye zonas de cultivo, fuentes y una veintena de escenas diferentes.
  1. Belén de Altura. Una de las peculiaridades de este Belén a tamaño real es su ubicación en la calle del Portillo de Altura, un bello rincón navideño de en esta pequeña población castellonense. Tiene 455 m² y está totalmente al aire libre.
  1. Belén de récord Guinness en Alicante. Alicante tiene el Belén con las figuras más altas del mundo, y por eso se ha convertido en una de las atracciones navideñas más destacadas de la ciudad. Se instala en la Plaza del Ayuntamiento, y sus figuras miden 17 metros (San José), 10 metros (Virgen María) y 3,25 metros (Niño Jesús).
  1. Belén de Tirisiti de Alcoy. El Belén de Tirisiti de Alcoy es una representación teatral única, con más de un siglo de historia, y uno de los pocos testigos de la tradición mediterránea de los belenes de títeres. Destaca su formato pequeño y la mezcla de elementos religiosos y populares.
  1. Belén Monumental del Santísimo Ecce-Homo del Cabanyal. El barrio marinero del Cabanyal, uno de los más auténticos de Valencia, también conserva sus propias tradiciones belenísticas. El Belén de la Hermandad del Santísimo Ecce-Homo tiene más de 200 piezas artesanales y más de 20 edificaciones. Su principal peculiaridad es que sus escenas abarcan todos los pasajes evangélicos del nacimiento de Jesús.
  1. Belén de Roca de Meliana. Quizá no destaca por su tamaño, pero el Belén de Roca de Meliana puede ser uno de los más «poblados» de toda la geografía española. Tiene más de 7.000 figuras, representa una veintena de pasajes de la vida de Jesús e incorpora escenas populares dedicadas a la huerta valenciana.
  1. Belén de Playmobil de Almassora. Este año, Almassora contará con un Belén de Playmobil que promete hacer las delicias de pequeños y mayores. Con un tamaño de más de 11 metros cuadrados, podrá verse el hall de Ayuntamiento de manera gratuita.
  1. Belén vertical de la Parroquia de San Nicolás. La Parroquia de San Nicolás de Valencia es una de las más visitadas de la ciudad desde que fue restaurada hace algunos años. Los actos de la Navidad de este año incluyen la exposición de un  belén vertical de seis metros de altura y cuatro de anchura en la capilla del beato Gaspar Bono. Un nacimiento original y totalmente único.
  1. Belemet de Jijona. Este Belén, de tamaño real, se caracteriza por su belleza natural, ya que la naturaleza forma parte intrínseca de su decoración. Se encuentra en el Barranc de la Font, en las faldas del Castillo de Jijona. Incorpora escenas religiosas, representaciones de oficios y hace mucha referencia a la cultura y la tradición local. Puede verse hasta el Día de la Candelaria, en el mes de febrero.